Cuando pensamos en mejorar el rendimiento de la producción de alimentos en la industria lo primero en lo que comúnmente nos enfocamos es en la búsqueda de métodos para lograr la disminución de costos operativos, cuando realmente, como gerentes de producción, tendríamos que ir más allá, e intentar adoptar un método adecuado para asegurarnos de que exista un correcto funcionamiento en todas las líneas productivas, es decir, hacer que toda la planta trabaje de forma optimizada.En este sector industrial, un “correcto funcionamiento” quiere decir que, por ejemplo, para la fabricación de pan, exista una fluidez en el proceso, en toda la generación de producción y sus diferentes etapas, desde la entrada de vehículos y pesaje, control de calidad y muestreo, marcaje y trazabilidad en recepciones, almacén, formulación, parametrización, planificación, gestión de agentes contaminantes, entre otros, hasta que se obtiene el pan germinado, y de allí a los puntos de consumo, la administración y control de esos materiales.En este orden de ideas, el primer enfoque que debemos tener siempre en cuenta es conseguir la tecnología ideal para hacer una medición de todo nuestro proceso productivo. En este caso, hablando de disminución de costos, la idea, entonces, es conseguir la mejor forma de medir los consumos energéticos, un aspecto que, evidentemente, eleva muchísimo los costos de producción en la industria de alimentación.
Tenemos que saber cuáles son los consumos energéticos para, posteriormente, hacer la optimización de dicho consumo, además de la respectiva revisión física de las líneas. Este sería un primer punto para mejorar el rendimiento de la producción de alimentos en la industria mexicana y, lógicamente, para conseguir la reducción y optimización de costos.Un segundo punto de vista sería buscar, en la medida de las posibilidades de nuestra planta, las herramientas adecuadas para la automatización de la fábrica o, en su defecto, para la reducción de la intervención humana, un hecho que nos permitiría contar con un proceso mucho más eficiente, porque con ello minimizamos un gran porcentaje de posibilidad de errores en formadora hamburguesas. En este punto es importante resaltar que la automatización y control de procesos industriales con las tecnologías adecuadas permiten mejorar el rendimiento de la producción de alimentos en la industria mexicana porque:
En SINCI, gracias a nuestra experiencia de 30 años trabajando en el ramo de alimentos y bebidas, reconocemos la instrumentación adecuada para ayudar a los responsables de planta, ofreciéndoles las tecnologías correctas para mejorar el rendimiento de la producción de alimentos en sus empresas, y eso incluye la reducción de tiempos muertos, la disminución de fallas y la eliminación de paros no programados, lo que, evidentemente, conlleva a la reducción de costos, que varía según el tipo y tamaño de la fábrica.